A los 10 meses, su bebé debería disfrutar de tres comidas sólidas al día. También estará preparado para aceptar que los alimentos más complejos, como los alimentos sólidos, sustituyan a la leche como fuente principal de nutrición. El bebé seguirá necesitando entre 500 y 600 ml de leche al día hasta que tenga dos años.
A continuación se muestra un ejemplo de programa de alimentación, que incluye sugerencias de alimentos para que se haga una idea de cómo estructurar nutricionalmente el día. Solo debe utilizarse como ejemplo para ayudarle a planificar las comidas y los horarios. No se necesario que lo siga estrictamente ni que sirva el mismo menú un día tras otro. Es importante dar al bebé alimentos variados. Cuantos más alimentos introduzca en su alimentación mientras es pequeño, menos probabilidades habrá de que tenga problemas con la comida cuando crezca. Una mezcla de comida de cuchara y con las manos es ideal para introducir variedad. Deje que el bebé establezca su propio ritmo y le sirva de guía.
El objetivo es servir al bebé las siguientes porciones diarias:
- 3-4 raciones de alimentos con almidón, como patatas, pan, pasta o fideos.
- 3-4 raciones de frutas y verduras.
- 2 raciones de proteínas, como carne, pescado, huevos o legumbres.