Una fiesta es una forma fantástica de celebrar la inminente llegada de una nueva vida. Como nueva o futura madre, será la invitada de honor. Esto es que debería esperar y lo que puede hacer para asegurarse de que ese día todo salga perfecto.
Lo tradicional en las fiestas previas a la llegada del bebé es que se celebren en la casa de un amigo o familiar cercano con ciertas indicaciones por parte de la futura madre. Sin embargo, en la actualidad muchas madres prefieren organizar la celebración ellas mismas. Cualquier opción es buena.
En primer lugar, programe una fecha y una hora convenientes para la fiesta. La mayoría prefiere un día cercano al final del embarazo, pero no demasiado próximo a la salida de cuentas. Otras personas prefieren esperar a que el bebé haya nacido antes de la celebración. La decisión es totalmente suya.
Tanto si es la anfitriona de la fiesta como si pide ayuda a un amigo, deberá decidir a quién invita. Los invitados a la fiesta suelen ser amigas o familiares, pero si prefiere que también vayan sus parejas y niños, déjelo claro en la invitación. Es su fiesta y usted establece las reglas.
Puede enviar por correo tarjetas de invitación diseñadas especialmente, aunque hoy día es más habitual invitar a la gente por Internet. Puede crear un grupo "fiesta de llegada del bebé" en una red social para facilitar la comunicación con los invitados, supervisar las necesidades dietéticas que pueda haber, etc. Intente avisar a los invitados al menos con 4-6 semanas de antelación para que apunten la fecha en sus agendas.
Si hay algún artículo para el bebé concreto que desee, lo mejor es enviar a los invitados una lista de regalos registrada para que puedan elegir. También puede pedir certificados de regalo para comprar un artículo más caro, como un extractor de leche, una cuna o una sillita. Si prefiere que la sorprendan, deje que sus invitados elijan algo, pero prepárese para muchísimos mamelucos.
Tenga en cuenta que la información proporcionada en estos artículos solo se ofrece a modo de asesoramiento general y en ningún momento debe considerarse como sustitutiva del asesoramiento médico profesional. Si usted, su familia o el bebé padecen síntomas o condiciones graves o persistentes, o si necesita asesoramiento médico específico, busque ayuda médica profesional. Philips Avent no asume responsabilidad alguna por los daños derivados del uso de la información proporcionada en este sitio Web.
You are about to visit a Philips global content page
Continue